El tercer circuito de cuerdas, enfocado a niños de mayor estatura, adolescentes y adultos, eleva ligeramente las plataformas por encima del suelo consiguiendo la altura suficiente para incrementar la sensación de vértigo. Las líneas de vida continua y los anclajes reforzados están dimensionados según normativa europea de turismo activo, lo que asegura la máxima estabilidad en las pasarelas y los elementos colgantes. Tanto los pasos de troncos como las tirolinas infantiles integradas en estos recorridos fomentan la agilidad y la autoconfianza de los participantes. La combinación de diferentes materiales —cuerdas de alta resistencia, maderas tratadas y conectores de acero inoxidable— conforma un circuito coherente y seguro.
El sistema de frenado incorpora una cinta elástica de absorción de energía que reduce la velocidad de forma progresiva, evitando impactos bruscos al final del recorrido. Los puntos de partida están equipados con pequeñas escaleras y barandillas, lo que facilita la subida de los usuarios y permite un flujo ordenado de pequeños grupos. Todas las tirolinas están homologadas según la norma EN 15567 de instalaciones de parques de aventura, y se revisan periódicamente antes de cada jornada de actividad.
Dentro de la oferta de multiaventura se incluyen tres circuitos de cuerdas diseñados para distintos niveles de dificultad.
Dos de estos circuitos están dedicados específicamente a niños de entre cuatro y diez años, con plataformas situadas a escasa altura sobre el suelo que permiten un primer contacto con el equilibrio y la coordinación. Los tramos inferiores cuentan con puentes de madera y redes de cuerda que, a muy baja altura, combinan el reto con la tranquilidad que aporta la proximidad al suelo. Estos itinerarios se complementan con sistemas de línea de vida continua y equipos de protección individual que garantizan la retención continua del usuario, bajo supervisión permanente de monitores capacitados.
En los circuitos de nivel bajo se integran tres tirolinas adaptadas para los más pequeños, cada una con un tramo que recorre una distancia de entre 20 y 30 metros. Estas tirolinas infantiles utilizan poleas de baja fricción y guías continuas que impiden el desenganche accidental, mientras que la altura apenas supera un metro sobre el suelo para minimizar riesgos. El lanzamiento desde plataformas de madera pintada, protegido con barandillas y redes perimetrales, ofrece a los niños una experiencia de deslizamiento controlado. La supervisión de los monitores se extiende al punto de llegada, garantizando un desembarque suave y asistido.
Para los usuarios más atrevidos y para personas con movilidad reducida o paraplejia, la instalación dispone de una tirolina automatizada de 126 metros de longitud, situada a nueve metros de altura. Este proyecto pionero en España, impulsado por la Fundación Kerbest con colaboración de Aspaym Castilla y León, integra un sistema de lanzamiento y frenado automatizado. El diseño universal de la plataforma de salida con una rampa adaptada, garantiza que personas con silla de ruedas puedan disfrutar de esta “atracción”. La estructura de soportes metálicos y cables de acero de alta resistencia cumple con los estándares de accesibilidad universal y rompe barreras físicas y emocionales.
El rocódromo se sitúa junto a la base de la tirolina adaptada, aprovechando la misma plataforma de acceso. Se trata de una pared de nueve metros de altura equipada con presas de diferentes colores y formas, pensada para principiantes, grupos escolares y los escaladores más atrevidos. Cada ruta está señalizada según su nivel de dificultad, lo que facilita el aprendizaje progresivo de técnicas de agarre y desplazamiento vertical. El panel de escalada cuenta con dos líneas de vida y cintas de anclaje que permiten practicar con cuerda fija y top rope, supervisadas en todo momento por monitores especializados.
turismoactivo@bykerbest.com
Fijo: +34 920 143 141
Av. Juan Carlos I, 30, 05004 Ávila
